sergiofarre: 100 CIMS - PENYA DEL PAPIOL (Sant Miquel d'Olèrdola

Empezamos las rutas del 2019 con un 100 Cim sencillito, cerquita de casa y con poca dificultad física, la Penya del Papiol.

Iremos hasta Sant Miquel d'Olèrdola y una vez allí, dejaremos el coche en el aparcamiento que hay justo delante del Restaurant La Casa del Conill.

El parking es muy grande y dudo que tengamos problemas para aparcar, lo complicado va a ser decidir donde dejamos el coche dada la gran cantidad de aparcamientos que hay.

Empezamos la ruta bajando por la Avinguda Catalunya dirección C-15.

Tenemos que ir un pequeño tramo por la carretera, vamos muy pegados al quitamiedos y pasamos las dos rotondas que hay al salir Sant Miquel d'Olèrdola. Es la única pega que le he encontrado a esta ruta, pero mientras caminábamos por la carretera nos cruzamos con varias personas caminando y paseando a los perros, por lo que debe ser algo muy habitual por aquí. De todas formas, precaución con los coches.

Cuando llegamos a la segunda rotonda, bajamos junto a los campos de viñas. Veremos un cartel que nos indica Masia Farreny, dejamos la masia a nuestra derecha y continuamos por la izquierda junto a las viñas y con la Riera de Canyelles a nuestra derecha, nos asomamos a ver si lleva algo de agua, pero está mas seca que la mojama.

Continuamos rectos y vemos un camino con un asfalto rosado a nuestra izquierda y un muro de piedra, en el muro tenemos marcas blanca y amarilla, así que seguiremos por donde vamos junto al muro de piedra, no haciendo caso alguno de ese camino que sale por la izquierda.

El camino gira hacia nuestra izquierda, un poste nos confirma que es la dirección correcta en la Xarxa de Senders de l'Alt Penedès. La calle sube un poquito y se vuelve bastante estrecha. Por el lado izquierdo veremos una casa, Ca La Teresa.

Dejamos Ca La Teresa detrás nuestro y en unos metros veremos La Casa del Sepulcre. Una casa señorial que quedó ligada al Sant Sepulcre, un templo creado por los Caballeros del Sant Sepulcre a mediados del siglo XI.

Seguimos caminando y los viñedos cada vez nos alejan más de Sant Miquel d'Olèrdola.

Dejamos detrás nuestro las últimas casas que hay después del Sant Sepulcre y subimos un poquito más por esta carretera muy poco transitada hasta llegar a un cruce, donde giraremos a la derecha dirección Can Colàstic / St. Pere Molanta.

A unos 470 metros a la izquierda de la carretera hay otro camino, iremos por él, al principio está asfaltado, pero al poco se convierte en una pista de tierra.

Al final de esta pista de tierra, salimos nuevamente a la carretera.

Giraremos hacia la derecha dirección Can Colàstic / St. Pere Molanta.

Éste último tramo por carretera es de unos 350 metros, y aquí sí que nos cruzamos con algún que otro coche. Cuando acaba el campo que tenemos a la derecha, giraremos dirección Cal Pau / Can Torres / Can Marc.

Continuamos rectos y pasamos junto a Cal Pau de la Barquera, luego el camino gira hacia la izquierda en una suave bajadita.

Si miramos hacia la derecha, pasado otro campo de viñas podemos ver el Castell de la Barquera, una pequeña montaña a la que podemos subir antes de ir a la Penya del Papiol, no nos pilla de paso, pero podemos acceder a ella haciendo un pequeño desvío.

Pasamos junto a Can Torres de Fontallada. La Masía Fontallada es una Masía histórica del siglo XVIII situada en pleno corazón de la región vitivinícola del Alt Penedès. La Masía se construyó en el año 1742 en el municipio de Olèrdola, en el barrio Molantenc de Font-Tallada. En este mismo barrio, en el año 1001, se plantaron las primeras cepas de toda la comarca. Actualmente la Masía Fontallada se conoce como Sogas Mascaró Caves i Vins.

Seguimos caminando hasta llegar al Veïnat de Can Torres, un barrio del que se cree que su origen tuvo lugar al ubicarse allí los trabajadores que tenía la masia de Can Torres.

En el veïnat de Can Torres tenemos una fuente de agua potable donde nos podemos refrescar y llenar las botellas de agua para lo que nos queda de excursión, nosotros aprovechamos para que Barbie y Maya beban lo que les apetezca. Una vez refrescados, continuaremos hacia la derecha dirección Torrent de Fontallada / Cal Jesús.

Bajamos por este tramo hasta llegar al Torrent de Fontallada, que al igual que la Riera de Canyelles esta seco.

Ahora tenemos dos cruces muy seguidos, primero giraremos hacia la derecha, como si fuéramos al Castell de la Barquera.

Y a unos 40 metros giraremos hacia la izquierda dejando esta carretera para continuar por camino de tierra.

Pasados unos 100 metros del último giro, a nuestra izquierda giraremos nuevamente dejando el Castell de la Barquera a nuestras espaldas. Si quisiéramos subirlo antes de tomar este nuevo desvío, el camino de acceso lo tenemos justo detrás, nosotros no fuimos y continuamos con la ruta a la Penya del Papiol.

A partir de ahora dejaremos el asfalto hasta llegar a la última parte de la ruta.

En los pinos empezamos a ver unas desagradables bolsas de procesionaria del pino, una oruga muy peligrosa que puede ser mortal para los perros, su toxina provoca necrosis allá donde el perro la toca, por lo que a partir de aquí a extremar las precauciones con Barbie y Maya y a mirar el suelo con mil ojos. Lo "bueno" por decir algo, es que como siempre van en grupo una detrás de otra son bastante fáciles de ver. En lo que nos quedó de ruta vimos unas cuantas, todas en fila y ... ni que decir tiene que todas las que nos encontramos acabaron espachurradas.

Después de subir la primera subidita importante, llegamos a un cruce, a nuestra izquierda está el acceso a Cal Jesús, cerrado con una cadena, nosotros iremos por la derecha dirección Cim del Papiol, un cartel en el pino que hay en medio nos lo señaliza.

A simple vista la subida no parece gran cosa, pero no nos dejemos engañar ya que la mayor parte de todo el desnivel positivo de la ruta lo haremos ahora en un tramo relativamente corto.

A mitad de subida, hay un camino que sale por nuestra izquierda, nosotros seguiremos rectos. Hay un poste que nos señaliza la dirección correcta para ir a la Penya del Papiol.

Las bolsas de procesionaria del pino vuelven a hacer acto de presencia, así que a abrir bien los ojos.

Ya queda poquito para terminar la subida y empezar a caminar por la carena.

El último obstáculo de la subida es una pequeña grimpada entre las piedras, se pude hacer sin problemas, es muy fácil.

Una vez que superamos la grimpada, acabamos de subir unos últimos metros y salimos a un ancho camino que va por la carena, desde aquí las vistas son buenísimas, y más en un día despejado y soleado como hoy.

Muy a lo lejos vemos una señera que está en nuestro objetivo, ya nos queda poco para llegar.

Después de dos horitas desde que empezamos la ruta, llegamos a la Penya del Papiol, un formidable mirador sobre la depresión del Penedès.

Tuvimos la suerte que pasó una pareja de runners y se ofrecieron a hacernos esta foto, muchas gracias pareja!!

Después de subir toca bajar, así que adelante!!!

El camino está muy bien señalizado con marcas blancas y rojas (GR), únicamente hay un posible punto donde se nos aparece otro camino por la izquierda, nosotros buscaremos las marcas del GR y bajaremos por la derecha.

Pasamos junto a una cantera.

El camino de bajada es casi todo por piedras sueltas.

La explotación minera de la cantera está en activo y nos advierte que hay peligro de explosiones, menudo mal rollo.

Dejamos el tramo de la cantera detrás nuestro y el camino se despeja de piedras sueltas, a lo lejos vemos una última subidita, nada en comparación con lo que ya hemos subido.

Tras la subidita ya vemos Sant Miquel d'Olèrdola, y yo en medio jejejeje.

Entramos en un tramo boscoso, cuidado con las orugas, por aquí nos volvimos a encontrar unas cuantas.

Pasamos junto a las ruinas de Cal Cantantingues, una antigua masía abandonada.

Pasadas las ruinas de Cal Cantantingues, salimos a un pequeño claro, seguiremos rectos como si fueramos directos hacia la torre de alta tensión, al final de este claro tenemos las señales del GR que nos confirman que vamos por el camino correcto.

A falta de árboles, una piedra en el suelo es buen lugar para señalizar el camino.

La última prueba de la ruta, poco antes de terminar la bajada, llegamos a un punto donde tendremos que hacer un destrepe, son unos cinco o seis metros, y atada al tronco de un árlbol hay una cuerda con la que nos podemos ayudar para bajar con mayor seguridad.

Continuamos por el camino hasta llegar a la carretera.

Una vez en la carretera, iremos hasta Sant Miquel d'Olèrdola.

Recordad que no hay una calzada para los peatones y que tendremos que ir por la carretera bien pegados al quitamiedos.

Y finalmente llegamos a Sant Miquel d'Olèrdola dando por terminada la ruta. Un 100 Cim muy chulo y fácil de hacer. Ideal para hacer una mañanita que nos apetezca hacer algo rápido y entretenido. El único punto negativo es tener que ir un tramo por la carretera.