Después de haber hecho el 100 Cim La Torre Alta, y unas compras en Tierraflor SL., en Poal (Lleida), me dirijo al segundo objetivo del día, el 100 Cim Tossal de la Moradilla.
Para llegar al punto de inicio, tenemos que ir hacia Lleida por la A-2. Tomamos la salida 474 dirección LL-11 Lleida Centre / N-240 Tarragona / C-12 Tortosa. Una vez en la LL-11, circulamos durante tres kilómetros hasta llegar a una rotonda, donde saldremos por la tercera salida, dirección LV-2003 Els Alamús. Al poco de salir, y empezar a circular por la LV-2003, a unos 80 metros, veremos un camino hacia nuestra derecha dirección Planta Reciclatge, iremos por aquí. Circularemos por este camino que va parelelo a la LV-2003 durante 900 metros, y luego giraremos hacia nuestra izquierda por el primer camino que encontremos. Continuaremos unos 600 metros, hasta llegar a unas ruinas, donde podemos dejar el coche perfectamente.
Dejamos el coche bien aparcado en el márgen del camino, nos equipamos y empezamos la ruta.
Subimos unos metros por el Camí de Moradilla, y ya podemos ver el 100 Cim Tossal de la Moradilla. Giramos hacia nuestra izquierda, y a la derecha de dos columnas de piedra, que son la entrada a una finca privada, hay un sendero, iremos por él.
Este sendero nos lleva directos al Tossal de la Moradilla.
El día se está torciendo un poco, cada vez hay más nubes, y el aire sopla con un poco de virulencia, a ver si tendré que salir corriendo.
La subida no es muy complicada, son 200 metros de distancia con un desnivel de 30 metros. No tiene ningún tramo complicado ni técnico, se va subiendo chino chano, con la calma.
Cuanto más nos vamos acercando al Tossal de la Moradilla, aunque la elevación no es mucha, las vistas son muy buenas. Suficientes para controlar una gran extensión del terreno.
Y como quien no quiere la cosa, en un plis plas llegamos a la parte más alta de la ruta, y ya tenemos otro 100 Cim en la saca. Tossal de la Moradilla (242 metros).
Los restos de la torre que vemos actualmente, la Torre de Moradilla, fueron construidos durante el siglo XIX, y se utilizaron como torre de telégrafo. En este mismo emplazamiento, antiguamente, había una torre de vigilancia de orígen árabe, que controlaba parte de la Horta de Lleida. Su estado actual es ruinoso, pero aún así, podemos observar los restos de lo que en su día fue una bóveda, y varias ventanas saeteras. Durante la Guerra Civil, se utilizó como enclave para un nido de ametralladoras.
Junto a la Torre de Moradilla, hay un cercado metálico muy oxidado, así que mejor ni acercase, no vallamos a tocarlo y pillemos el tétanos.
Nada más pasar el cercado, un enorme agujero protegido con una malla de plástico naranja, se nota que por aquí hace mucho tiempo que no hacen nada de matenimiento. Mucho cuidado con asomarse al agujero, que tiene una buena caída.
Pasadas las ruinas de la Torre de Moradilla, tenemos un vértice geodésico.
Aquí con Maya inmortalizando el Tossal de la Moradilla.
Seguimos rectos y vemos que el camino nos lleva hacia una formación rocosa con unas ruinas que hay más adelante.
Bajamos hasta un pequeño cruce, y continuamos rectos.
Hacemos una pequeña grimpada y llegamos a las ruinas de lo que fueran unas trincheras / búnquer del ejército republicano durante la Guerra Civil.
Tiene varios accesos a ambos lados.
Este búnquer se construyó aprovechando la formación rocosa que hay frente al Tossal de la Moradilla, como en la Horta de Lleida no hay muchas elevaciones de terreno, éste enclave era perfecto estratégicamente para controlar una gran extensión de terreno pese a su baja elevación.
Yo voy hasta casi el final y entro por una entrada lateral bastante estrecha.
Su interior es muy amplio, y los muros tienen un grosor enorme.
Bajo nuestros pies, hay otro nivel subterráneo, que seguramente conecte con la Torre de la Moradilla, donde también se instalaron varias ametralladoras, pero su acceso es prácticamente imposible, yo le eché un vistazo, y como iba solo y no lo ví muy claro, tampoco me metí a investigar.
En las placas que hay a los lados de las galerías de tiro, aparecen las fechas y los constructores de este búnquer, pero los vándalos las han estropeado considerablemente.
La galería de tiro tiene muchas ventanas a ambos lados, si nos fijamos, tienen una forma de construcción muy similar a las ventanas saeteras, las que utilizaban los arqueros en los castillos medievales. Cambiamos las armas a utilizar, pero la forma de construir, casi idéntica.
Aunque se construyó para defenderse del ejército nacional, para cuando llegaron, las tropas republicanas ya lo habían abandonado al tener que ir a defender otros frentes, por lo que nunca se llegó a luchar en este lugar. Curiosamente, sí que se utilizó en el año 1959 para el rodaje de la película La Fiel Infantería, donde se rodó el combate final de la película.
Una vez que hayamos visto el búnquer, volveremos hacia el Tossal de la Moradilla.
Cuando lleguemos al cruce que hay en medio de los dos montículos, giraremos hacia nuestra derecha para ir por el sendero que nos llevará hacia la balsa de la granja que hay más abajo.
El camino baja directo hacia la granja, pero luego gira a la izquierda y va parelelo a ella, sin llegar a meterse en la propiedad.
A nuestra derecha la granja y una enorme balsa de agua.
Parecía que el tiempo iba a guantar todo el recorrido, pero justo ahora en la parte final la cosa se ha complicado y empieza a llover de lo lindo, menos mal que ya queda poco para llegar al coche, si no hubiera acabado como un pollito mojado.
El tramo que nos queda hasta llegar al coche está perfectamente definido, y es casi casi plano.
Una última bajadita y ya llegamos al coche, dando así por terminada esta corta, pero interesante excursión para conseguir otro 100 Cim. Como no tiene ninguna dificultad de grimpadas o desgrimpadas, es apta para todo tipo de personas, la única precaución que hay que tener es el enorme agujero que hay pasada la Torre de la Moradilla, y el acceso al nivel inferior del búnquer. Si llevamos a peques, habrá que vigilarlos para que no se metan donde no deben. Ideal para combinar con otros 100 Cims cercanos de la zona. Como yo ahora ya empiezo el regreso a Mataró, haré un pequeño desvío para subir al tercer 100 Cim del día, Els Bessons.
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