Inauguramos las entradas del blog del año 2021 deseando a tod@s muy buen año, que esta pandemia acabe de una vez por todas, y que podamos compartir muchas entradas. Empezamos el año con un nuevo 100 Cim, el Puig de Sant Miquel. Un 100 Cim que intentamos hacer el 31 de diciembre del 2018, y no pudimos, por una niebla muy espesa que apenas nos dejaba ver más allá de cinco metros; por suerte, hoy hace un día totalmente distinto.
El punto de inicio se encuentra en Rubió, una pequeña localidad de la comarca de L'Anoia. Como hoy en día casi todos nos guiamos para llegar a los sitios por el GPS del coche, o la aplicación de Google Maps en el móvil, voy a dejar de dar las explicaciones de cómo llegar a los lugares donde se inician las rutas, salvo que sea algo muy complicado.
Nada más llegar a Rubió, después de una curva hacia la izquierda muy cerrada, tenemos una amplia zona donde podemos aparcar el coche.
Una vez que nos hemos preparado (mochila, cortavientos, bocata, agua ...), iniciaremos la ruta, dirigiéndonos hacia el cementerio. Justo al lado del cementerio tenemos un poste indicativo de los Camins de l'Anoia, nosotros bajaremos dirección Ca l'Alzina.
Una vez que dejamos el cementerio de Rubió detrás nuestro, a los pocos metros pasaremos junto a la Creu de Processó de Rubió.
El camino es amplio y con una bajada suave y poco pronunciada.
Cuando llevemos unos 350 metros caminados desde el cementerio, seguiremos por una curva que gira hacia la izquierda dejando el camino principal.
Una vez tomada la curva, iremos por un sendero bastante estrecho.
Superchiwis modo off-road jajaja.
El sendero se vuelve más ancho y a nuestra derecha veremos un camino que baja. No hay ningún tipo de señalización y es fácil pasarlo de largo. Más o menos está a unos 350 metros desde que empezamos a caminar por este tramo.
Bajando por esta torrentera salvaremos un desnivel de unos 20 metros. Se puede bajar andando sin ningún tipo de dificultad.
Tras la bajada, atravesaremos el Torrent de les Marrinxes, actualmente seco.
Nada más pasar el Torrent, salimos a un camino ancho por el que seguiremos hacia la izquierda.
El camino gira hacia la derecha y empezamos una fuerte subida para llegar al Pla de Rubió.
La subida son unos 400 metros, así que a tomárselo con calma.
Llegamos a una pequeña explanada donde veremos unas señales que indican Sant Pere d'Ardesa y El Pla de Rubió.
Justo entre las dos señales se puede ver un camino que sube. Cogeremos este camino para seguir nuestra ruta.
A la derecha de este camino tenemos la Marrinxa de Cal Guixa.
Este tramo tiene unos 350 metros con una suave subida.
Poco antes de dejar el sendero, a nuestra derecha, tenemos una mejor visión de la Marrinxa de Cal Guixa.
Ahora el camino continúa hacia nuestra derecha por una pista más ancha. Por esta pista circulan coches, motos y mountain bikes.
Llegamos a Sant Pere d'Ardesa, donde podemos ver por fuera la Ermita de Sant Pere d'Ardesa.
La rodeamos y vamos hacia su derecha.
Una señal nos indica el camino para llegar a nuestro destino, el Puig de Sant Miquel. Tenemos 300 metros con un desnivel del 26,33%.
Un último vistazo al ábside de la ermita, y ¡¡¡a por el Cim!!!.
A simple vista, no parece gran cosa, a ver qué tal a medida que vayamos avanzando.
El sendero es estrechito y está muy bien definido, no hay posibilidad de pérdida. Cuanto más subimos, mejores son las vistas.
Los últimos metros son los que acumulan más desnivel y pendiente, pero tenemos unas barandillas de maderas con las que ayudarnos, aunque no las hemos tenido que utilizar en ningún momento. El cartel de la ermita asusta un poco, pero luego ... no es tan fiero el lobo como lo pintan.
Puig de Sant Miquel (734 metros) Rubió - Anoia.
Otro 100 Cim más para nuestra colección.
Aprovechamos para tomarnos el bocata, y así disfrutar de las espectaculares vistas que hay desde aquí arriba. Un pequeño pesebre de madera, utilizado como nido por algún pajarito.
Desde el Puig de Sant Miquel, a su izquierda hay un pequeño sendero que baja, seguiremos por él y así hacer una ruta circular muy chula. Como observación, es una zona donde se practica mucho el trial, cuando estábamos en el Cim aparecieron dos motos de la nada, y más adelante, en la zona de los aerogeneradores volvieron a aparecer tres más.
Continuamos por la carena de la Serra de les Maioles.
El camino no tiene pérdida alguna, siempre hacia adelante.
Poco antes de llegar a los aerogeneradores, hay una alambrada a nuestra izquierda, al otro lado hay ganado suelto.
Una última subida y llegamos a los pies del primer gigante del parque eólico.
Una vez arriba, como no, toca bajar, una desgrimpada con muy poca dificultad, se puede bajar caminando sin problema.
Me parece que esta imagen está mezclada con otra película jejeje.
El parque eólico se extiende por toda la Serra de Rubió y la Serra del Grau.
Después de cruzarnos con otros tres motoristas de trial que subían hacia el Puig de Sant Miquel, el sendero nos lleva a una enorme y ancha pista de tierra.
Iremos hacia nuestra izquierda por el PR-C 119.
El sol está empezando a apretar de lo lindo, menos mal que pronto dejaremos este tramo tan pelado.
Seguimos la carretera hacia arriba, hasta salir a la carretera.
Al llegar a la carretera BV-1037, iremos hacia nuestra izquierda para llegar a Rubió.
Un panel informativo nos avisa de las normas del Parc Eòlic de la Serra de Rubió.
Vamos por nuestro lado izquierdo, aunque por esta carretera apenas pasan coches. De vez en cuando pillamos alguna que otra sombra, que se agradece bastante.
Segunda foto juntos en toda la ruta, todo un record, jejeje.
Dos kilómetros caminando por la carretera y llegamos a la parte Norte de Rubió, donde hay una cruz y un cartel con el nombre del pueblo y la altura de este punto.
Nos ponemos las mascarillas, que estamos entrando en un núcleo urbano, aunque no nos encontramos a nadie, y giramos a la izquierda para llegar a su ayuntamiento.
Nos acercamos al Ayuntamiento y ya podemos ver Santa Maria de Rubió.
Gemma junto al Ayuntamiento de Rubió. Pequeñito pero muy bonito.
Para finalizar la ruta, podemos visitar la Iglesia de Santa Maria de Rubió, una joya del siglo XI que merece unos minutos de nuestro tiempo. Una vez visitada, salimos nuevamente a la carretera, bajamos unos pocos metros y llegamos a la zona de aparcamiento, dando así por finalizada esta excursión. Una ruta sencilla, de poca dificultad técnica y con una vistas muy chulas.
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