Después de un pequeño parón en cuanto a actividades físicas, vuelvo a tomar contacto con la naturaleza con una ruta sencillita, y muy suave, el 100 Cim - Castell de Boixadors.
Para llegar al punto de inicio, tenemos que ir a Sant Pere Sallavinera por la N-141b. Entre el punto kilométrico 25 y 26, veremos un desvío hacia Seguers, por la BV-3051, lo tomamos y seguimos por esta carretera durante 3,8 kilómetros, hasta llegar a un cruce donde veremos un transformador eléctrico, aquí giraremos hacia nuestra derecha, y continuaremos unos 400 metros hasta llegar a Cal Gironella, donde giraremos a nuestra izquierda, y seguiremos otros 250 metros, hasta llegar a un claro donde dejaremos el coche.
Dejamos el coche bien aparcado, donde no moleste mucho, y nos preparamos para la ruta. Para sorpresa nuestra, el día no acompaña para nada, está lloviznando, hace bastante aire, y tenemos mucha niebla, así que vamos a intentar hacer la ruta lo más rápido que podamos. Nos equipamos con lo mínimo que necesitemos, para ir lo más ligeros posibles, y empezamos la ruta.
Tal cual dejamos el coche, hay un camino que baja hasta la Església de Sant Pere de Boixadors.
Se trata de una parroquia construida en el siglo XIX, con la finalidad de sustituir la antigua Parròquia de San Pere de Boixador, que se encuentra justo al lado del Castell de Boixadors. Junto a la iglesia, tenemos la rectoría, que esta adosada al muro de levante, y un poquito más apartado, encontramos el cementerio, un poco más arriba de donde hemos aparcado el coche.
Delante de la iglesia, podemos ver una Creu de Terme. Se trata de una cruz latina de hierro situada sobre un pilar hexagonal, que descansa sobre una base de piedra cuadrada, se cree que es de finales del siglo XIX, principios de siglo XX.
Volvemos sobre nuestros pasos hasta el coche, y ahora iremos hacia nuestra derecha, para ir hacia Cal Gironella.
Cal Gironella es una casa aislada situada muy cerca de la Església de Sant Pere de Boixadors. Es una edificación cuadrangular construida en el año 1881, a la que se le han ido añadiendo diferentes edificaciones, quedando en el estado actual. La masía original, estaba unos metros más al norte, pero debido a su mal estado, se optó por construir ésta, utilizando algunas de las piedras de la antigua masía.
Dejamos Cal Gironella detrás nuestro, seguimos unos metros rectos, y dejamos el asfalto para continuar por un camino de tierra.
Avanzamos y llegaremos a una bifurcación, nosotros seguiremos rectos, obviando el camino que va hacia nuestra derecha.
Entramos en el bosque, y el camino se junta con otro que viene por nuestra izquierda. Nosotros de momento seguimos subiendo por donde vamos.
Un poquito más adelante, veremos que a mano izquierda hay una carretera asfaltada.
Dejaremos el camino de tierra y subiremos por ella dirección al Castell de Boixadors.
La subida es bastante pronunciada e intensa, así que con la calma, bueno, en nuestro caso hemos ido todo lo rápido que hemos podido, ya que la llovizna, el aire, y la niebla, no hacen que ésta sea la excursión más agradable que hayamos hecho hasta ahora.
Al terminar esta primera subida, llegaremos al Coll del Castell, donde a nuestra izquierda veremos las ruinas de la Casa Nova del Castell, que de nueva no tiene casi nada. Como mucho, mirarla desde fuera, y no se os ocurra entrar dentro ya que su estado es ruinoso, y acceder a su interior podría ser peligroso.
Dejamos la Casa Nova del Castell, y vamos al Coll del Castell, donde giraremos hacia nuestra derecha para seguir subiendo hasta llegar al castillo.
Tenemos postes indicativos, y varios paneles informativos que nos indican el camino a seguir, desde aquí es como bastante difícil e improbable que nos perdamos jejeje.
Una última subida entre la niebla y fuertes ráfagas de viento, y cuando veamos una señal de parking, giraremos hacia la derecha. Si no tenemos ganas de subir andando, podemos subir con el coche hasta aquí mismo, y hacer una mini ruta de 200 metros para llegar al castillo.
Nosotros seguimos por el camino barrado con una cadena, y aunque no se vea, el Castell de Boixadors está a menos de 100 metros desde aquí, la niebla es tan espesa que apenas se ve más allá de unos 30 metros.
Cuando estamos justo debajo del Castell de Boixadors, como a unos 25 metros, empezamos a ver un poquito este precioso castillo.
Junto al castillo, tenemos la antigua Parròquia de Sant Pere de Boixadors. Esta iglesia de estilo románico, fue construida en el siglo XI, existiendo documentación en que se la menciona, en el año 1015. Se trata de un edificio de una sola nave, el cual se fue ampliando y modificando a lo largo de los siglos, hasta su estado actual.
En el año 1931, se firmó un contrato por el que se construiría la actual
Parròquia de Sant Pere de Boixadors, la que hemos visto al empezar la
excursión, y ésta al dejar de tener la categoría de parroquia, se
convirtió en la Esglèsia de Sant Pere de Boixadors.
Junto a la iglesia, tenemos un panel con muchísima información sobre el Castell de Boixadors.
La puerta de acceso a la iglesia, está en uno de sus laterales. Antiguamente había otra puerta en la pared opuesta, para acceder directamente al castillo, pero con los años se tapió.
Al lado de la iglesia hay un enorme panel informativo con muchísimos puntos de interés, pero tal y como está el día, bastante que hemos visto el panel jajaja.
Tras el panel, una pequeña zona de picnic con un par de mesas y bancos de madera, hoy casi que nos volvemos al coche y nos comemos el bocata dentro, calentitos, sin mojarnos, y sin tener que aguantar el viento y el frío de la niebla.
Damos la vuelta a la iglesia, y nos acercamos al castillo.
El acceso al castillo está cerrado, si lo queremos visitar, podemos venir el primer domingo de cada mes, de 11 a 13:30. El precio de la entrada, según la web del Ajuntament de Sant Pere Sallavinera, es de 3 euros por persona, se tiene que pagar a partir de los 10 años.
Castell de Boixadors (848 metros). Otro 100 Cim más a la saca!!!.
Como tampoco hay mucho más que podamos ver, volvemos hasta el Coll del Castell, y ahora iremos por el camino que tenemos justo delante nuestro.
Se trata del Camí dels Seguers a la Casa Nova del Castell, una pista de tierra en perfecto estado, y por la que seguramente nos cruzaremos con más de un coche que sube hasta el castillo. Nosotros, incluso con el mal día que hacía, nos cruzamos con tres coches, o sea que en un día que haga buen tiempo ... deben subir unos cuantos coches más.
Primero haremos una pequeña subidita, y luego el camino siempre será de bajada. Aunque veamos senderos a uno y otro lado del camino, nosotros permaneceremos en esta pista de tierra.
En la parte donde la inclinación es más acentuada, la pista está asfaltada, supongo que para evitar que los coches que suben patinen, si la pista siguiera siendo de tierra.
Pasado ese tramo, la pista vuelve a ser de tierra. Poco antes de salir a campo abierto, se nos cruzará otro camino perpendicularmente, nosotros siempre por la pista.
Saldremos a un zona con campos de cultivo, y un par de encinas a cada lado del camino como único elemento rompedor del paisaje.
Más adelante, veremos un poste a nuestra derecha con indicaciones de los Senders de l'Alta Anoia.
Y a escasos metros de él, otro poste con indicaciones para llegar al Castell de Boixadors, y al Corrego, ésta última dirección, es la que seguiremos nosotros.
La pista hacia el Corregó gira hacia la derecha en una gran curva, donde podemos ver unas curiosas y enormes piedras, que han sido colocadas como si se tratara de un pequeño dólmen.
Seguimos caminando entre la niebla y grandes ráfagas de viento helado, y llegamos al siguiente cruce de caminos.
En el cruce tenemos dos postes con indicaciones de caminos a seguir, y diferentes rutas para hacer con BTT, y aunque parezca mentira, ninguno de ellos indica el camino por el que tenemos que seguir ahora jejeje. Nosotros continuaremos por la pista que vamos siguiendo el trazado que llevábamos, giraremos hacia nuestra derecha siguiendo la curva.
Al final de este camino de tierra, llegaremos a una carretera asfaltada, por la que seguiremos girando hacia nuestra izquierda.
A mano derecha, tenemos un pequeño oratorio con una imagen de la Mare de Déu de Montserrat.
Y junto a ella, otro panel con los horarios de visita del castillo.
Antes de salir a la carretera, otro poste con diversas direcciones, nosotros iremos hacia Cal Gironella / Esglèsia de Boixadors.
Esta carretera se la conoce como el Camí de la Llavinera, es poco tramo por asfalto, no es que haya mucho tráfico, solo nos hemos cruzado con un par de coches, pero con la niebla que hay, mejor ir con cuidado.
Más adelante veremos un camino que empieza a nuestra izquierda, seguiremos por él dejando la carretera.
Ahora iremos dirección a Les Bassetes.
Subimos un pequeño tramo de pista de tierra entre una espesa niebla, que de nuevo, no nos deja ver nada del paisaje.
Pasamos junta a Les Bassetes, otra masía diseminada de Sant Pere Sallavinera.
Continuamos por la pista forestal, y ahora el camino va girando hacia la derecha.
Llegamos a otra bifurcación donde iremos por el camino de la derecha, el de nuestra izquierda nos llevaría al Cementiri de Boixadors.
Caminamos los últimos metros de esta ruta, y llegamos al lugar donde dejamos aparcado nuestro vehículo al inicio de la ruta. Una excursión fácil, sencilla, y con poca exigencia física, salvo la primera y casi única subida de todo el recorrido. Lástima que el día no ha sido el más idóneo, y la niebla no nos ha dejado ver absolutamente nada hasta tener las cosas delante de las narices, que si no, las vistas son una pasada. Y con esta ruta, cerramos el 2023, a ver qué tal se presenta el 2024, espero poder seguir añadiendo muchas más entradas al blog.
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