Desde Solsona, iremos a buscar la LV-4241, dirección Sant Llorenç de Morunys.
Pasados unos 22 kilómetros de buenas curvas, y después de dejar a nuestra derecha el Hostal del Vent, giraremos a la izquierda para ir por la L-401 dirección a Cambrils.
Circulamos unos 2 kilómetros y nada más pasar el puente que está encima del Torrent d'Urdell podemos aparcar el coche a la izquierda, hay espacio suficiente varios coches.
Desde el lugar donde dejamos el coche, vamos hacia el puente y ya veremos un camino que baja hacia el cauce del Torrent, si no lo vemos se trata de ser un poco intuitivos y bajar como mejor podamos hasta llegar al agua, en menos de cinco minutos llegaremos.
Una vez en el cauce, al principio tendremos que sortear dos gigantescas ruedas de tractor y ya empieza el barranco de verdad.
Tras unos 50 metros de pequeños resaltes nos encontramos el primer rápel, 20 metros con una instalación a la derecha orográfica.
Después tenemos un pequeño rápel de 6 metros a nuestra izquierda y ya llegamos a la parte más bonita e interesante de todo el barranco, el Salt de la Perdiu.
Son tres rápeles encadenados ya que la configuración de esta parte del Torrent d'Urdell hace obligatorio este fraccionamiento para no tener serios problemas a la hora de recuperar las cuerdas.
El primer rápel del Salt de la Perdiu tiene la instalación a la derecha, y nos encontramos con un rápel de 25 metros.
Luego llegaremos a una pequeña repisa donde caben tres personas, y montaremos el siguiente rápel de 17 metros en la instalación que vemos a nuestra izquierda.
Para terminar este fraccionamiento y de paso el barranco tenemos el último rápel, un volado de unos 11 metros aproximadamente con una salida muy mala, es fácil engancharse la mano entre la cuerda y la roca al empezar el rápel.
Nada más terminar este rápel seguimos el cauce y veremos a mano izquierda un camino que va hacia la pared, seguimos avanzando unos 100 metros y ya veremos el inicio de la vía ferrata de Puig Arnau.
La vía ferrata no es difícil, se trata de una pared de 120 metros que sube sin parar, el problema que se nos puede presentar, es que al llevar todo el peso del material para bajar el barranco, neopreno, cuerda, mosquetones ... hace que la vía sea muchísimo más pesada.
A parte de eso hay que tener en cuenta que los escalones los debió instalar algún gigante ya que están muy separados unos de otros y en ocasiones hay que hacer un poco de acrobacias para alcanzarlos.
Respecto al material, escalones y línea de vida, están en perfecto estado.
Una vez que acabamos la vía ferrata seguimos rectos hasta llegar a una pista que seguiremos hacia la izquierda, saldremos a la carretera y en dos o tres minutos ya llegamos al coche.
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