sergiofarre: 100 CIMS - TAGAMANENT (Tagamanent

Aprovechando el último día de vacaciones de Semana Santa, esta mañana Judit y yo iremos a buscar otro "cromo" para nuestro reto de los 100 Cims, el Tagamanent. En realidad ya lo hicimos el 30 de septiembre de 2017, pero como perdí las fotos y no lo puedo documentar fehacientemente, hoy lo volvemos a repetir pero por otra ruta distinta a la inicial.

Vamos por la C-17 y tomamos la salida de Tagamanent. Al entrar en la población llegamos a una rotonda donde seguiremos por la segunda salida, Carrer Picamena. Continuamos rectos por el Carrer Picamena hasta llegar al Carrer Cingles de Bertí, aquí iremos por la izquierda hasta el final de la calle donde giraremos nuevamente hacia a nuestra izquierda para bajar por el Carrer El Brull. Al llegar a la parte de abajo del Carrer El Brull, hay un cartel, nosotros continuaremos por la derecha dirección El Turó i Pla de la Calma. A unos 700 metros a mano derecha y en una curva muy cerrada, hay una carretera estrecha y con mucha pendiente que nos lleva al Tagamanent / Pla de la Calma. Una vez que empezamos a subir por esta tortuosa carretera, a los 4,1 kilómetros, aproximadamente unos 10-15 minutos, a nuestra izquierda veremos un buen sitio donde podemos dejar el coche.

El Collet de Vilardebó. Aquí dejaremos el coche donde menos moleste, por si quieren aparcar más vehículos y empezaremos y finalizaremos la ruta en este punto.

Subimos por la carretera unos 30 metros y seguiremos por una pista de tierra que sube por nuestra izquierda dirección El Soler.

Como ha llovido mucho estos últimos días la pista de tierra es una pista de barro en la que se patina con bastante facilidad, a ver si nos vamos a dar un baño de barro gratis jejeje.

A unos 400 metros de empezar a caminar por esta pista, a mano derecha hay un camino que supuestamente podría ser el camino de retorno y así poder evitar bajar por la carretera hasta el coche, parece que lo han limpiado y es transitable, pero después de mirar unas cuantas reseñas por internet, nadie ha bajado por él al estar muy vestido de vegetación o no encontrar el inicio, así que ... por si alguien se anima, ya sabe.

Seguimos subiendo y a unos 250 metros de ver la salida del posible camino de retorno, tenemos otro camino que sube por nuestra derecha, dejaremos la pisa ancha y continuaremos subiendo por él.

La subida es un pelín fuerte y llevamos un ritmo bastante rápido así que me paro un momento a recuperar el aliento.

Judit como no lleva mochila y tiene los huesos huecos, no tiene piedad de mí y sigue adelante, cuando me ve un poco lejos, para y me espera, que detalle.

Un poquito más de subida y dejaremos este camino para continuar por el GR-5. Barbie y Maya se lo están pasando genial, van hechas unas guarruzas por el barro pero da lo mismo, cuando lleguemos a casa las metemos en la ducha y como nuevas.

Barbie dejando una bonita huella a su paso, intentamos que Maya dejara su huella, pero al ser tan pequeñita y pesar tan poco fue misión imposible.

Estamos en el Collet de Martí de Farràs. Aquí dejaremos la pista por la que hemos subida hasta ahora y continuaremos por la izquierda ascendiendo por el GR-5.

El poste que señala en GR-5 está muy deteriorado, es casi ilegible, pero el camino a seguir no presenta dudas, en unos metros veremos marcas de confirmación.

Vamos subiendo por el bosque por un camino empedrado que perecen escaleras.

Ha caído tanta agua en estos últimos días que hay tramos en los que parece que el camino sea una pequeña riera.

Dejamos el bosque y salimos a una zona abierta, el Serrat de Llenyaters, desde aquí ya podemos divisar el Turó de Tagamanent justo delante nuestro. Cuando llegamos a esta zona notamos un fuerte olor a ... animal muerto ... estuvimos mirando a ver si veíamos a la pobre víctima pero lo único que notábamos era el fuerte olor que desprendía, mejor pasar rapidito.

Dejamos el Serrat de Llenyaters y volvemos a otro tramo por en medio del bosque.

En esta parte de la ruta, en el suelo se puede ver una especie de laminado. Hace millones de años aquí hubo un mar, que a medida que se fue secando formó este laminado.

Judit se está riendo, qué habrá visto?

Un pedazo de charco en medio del camino por el que nos vamos a tener que meter sí o sí, por eso se reía tanto. Barbie no tiene problemas en meterse de lleno, Maya ... en brazos, que si no se nos ahoga.

Dejamos el charcazo detrás nuestro y ... entramos en la zona de patinaje artístico, hoy se van a poner buenas las botas jajaja.

El camino entre el bosque se termina y salimos al Collet de Sant Martí, donde están de obras desde hace ya bastante tiempo.

Desde el Collet de Sant Martí empezaremos a subir para llegar al Turó de Tagamanent.

Un enorme mapa del Parc Natural del Montseny donde se indican algunas de las rutas que podemos realizar por la zona.

Empezamos el último tramo de subida de la ruta.

A nuestra derecha unas ruinas que están restaurando.

Cuidado que hay riesgo de derrumbamientos.

Barbie va mirando a los lados para ver si se cae alguna piedra jejeje.

Cuando llegamos a la parte de abajo del Turó, vemos más señales de advertencia y peligro.

Menos mal que hay dos puntales que soportan la montaña que si no ....

Llegamos a un punto donde tenemos que hacer un giro de 180º para subir hasta arriba. Un poste nos advierte que si seguimos rectos dejaremos el PR-C y el camino al Turó de Tagamanent, por ese camino es por donde haremos el regreso al coche.

Seguimos el camino para llegar arriba del todo.

Delante nuestro tenemos el Montseny a nuestra izquierda y el Montnegre i el Corredor a nuestra derecha.

Maya se adelanta para inspeccionar el camino.

El Figaró i Montmany a primera vista y al fondo Sant Llorenç del Munt.

Para subir podemos ir por el camino o seguir por un senderito que rodea el Tagamanent, nosotros vamos por el senderito, hay un tramo un poco estrecho donde hay que vigilar un poco.

Al fondo de todo todavía se ve el Turó de l'Home con un poco de nieve en su cabecera, este año ha sido muy generoso en cuanto a nevadas.

Por fin vemos la Esglèsia de Santa Maria, un edificio románico del Siglo XII que ha sufrido muchísimas modificaciones hasta el día de hoy. Inicialmente estaba el Castell de Tagamanent, nombrado ya en el año 945, pero del castillo ya solo quedan unos pocos restos. Actualmente están haciendo trabajos de restauración y no se puede acceder al interior (Abril de 2018)

Nos sentamos en el prado que hay delante de la iglesia a desayunar y ... vaya botas que nos hemos puesto jajajaja.

Judit y su bocadillo se han convertido en los mejores amigos de Barbie y Maya, no se separan de ella ni un centímetro.

Otro 100 Cim para la colección, el Tagamanent.

Ahora empezamos el regreso. En vez de bajar por donde hemos subido, iremos por un camino que hay justo delante de la iglesia.

A la subida primero llegó Maya, a la bajada ha sido Barbie.

Cuando lleguemos al punto donde está el poste que dice que por ahí no sigue el PR, nosotros seguiremos rectos por el sendero y así evitar tener que volver por el mismo camino de subida.

Primero hemos bajado muy bien, el camino es estrecho pero está muy bien marcado pero a unos cuantos metros ... toca bajar haciendo un poco de patinaje artístico jejeje.

Cuidadín y buen letra que el suelo está bastante resbaladizo ... y si no que se lo cuenten a Judit que acabó en el suelo de un patinazo.

Al final del sendero salimos a una pista muy ancha, aquí giraremos hacia nuestra izquierda.

Un poco más adelante, a nuestra derecha sale otro camino que baja, teóricamente si fuéramos por él saldríamos casi al inicio de la ruta, pero como no he visto ninguna reseña en la que alguien haya podido bajar por este camino, por estar lleno de vegetación, no nos la jugamos y seguimos rectos.

Aprovechamos para dejar a las bichillas sueltas un rato, que dentro de poco tocará llevarlas atadas.

Y como no, Barbie ve un charco y ... a refrescarse las patitas.

Cuando salimos a la carretera ya solo nos queda girar a nuestra derecha y bajar hasta llegar al coche.

Andamos 1,5 kilómetros por la carretera hasta llegar al Collet de Vilardebó donde tenemos aparcado el coche. Una ruta muy bonita y sencilla de hacer, ideal para hacerla durante una mañana o combinarla con algún otro cim cortito y cercano.